"Todo el aprendizaje y preparación para
el teatro en las corrientes renovadoras,
lleva a una búsqueda de prácticas o técnicas
destinadas a integrar la mente y el
cuerpo (cuerpo, pensamiento, sentimientos,
emociones), que la cultura occidental
divide y contrapone en favor de la actividad
del intelecto, de la mente sobre el
cuerpo. Una gran parte, por no decir uno
de los temas centrales de las prácticas teatrales,
tiene este punto en el núcleo de sus
planteamientos y reflexiones —es el caso
de Grotowski y Barba, y de Lecoq con la
máscara neutra—, con lo que hoy se llama
el estado pre-expresivo. Encontramos
aquí cómo el teatro occidental se inspira
en Oriente para recuperar una no división
cuerpo/mente que en otros momentos de
su historia no ha padecido. Es por esta razón
que para Brook, por ejemplo, es un
error empezar la aproximación a un texto
desde el análisis racional, ya que son más
poderosas las facultades de la intuición;
es, después de este trabajo previo, cuando
el actor llega al texto"
(El cuerpo del actor en el teatro contemporáneo.La fértil transculturalidad
-Carmina Salvatierra)
Es verdad que aún seguimos ligados mayoritariamente a un modelo de enseñanza, casi me atrevería a decir en general en tantos campos, que considera que comprender intelectualmente algo es aprender. Ese modelo reproduce una fragmentación propugnada por la modernidad, y los usos extremos del paradigma de un mundo razonable. Hoy diferentes caminos, muchos que también abrevan en el diálogo con filosofías orientales, escuchan al cuerpo como real presencia del decir de las enfermedades, de las emociones y por qué no, del perfil real del humano. Para sortear esa desconexión es necesario entonces escuchar al cuerpo, abrirse a las emociones y por ende serenar la mente, tantas veces tirana. No es negarla ni despreciarla como herramienta del sujeto, es llamarla a dejar el centro y cooperar. En el teatro este camino se abre como posibilidad al entender que la construcción posible de los actores parte y se sostiene en la profundización del vínculo con el cuerpo. Esto es un primer trabajo de liberación de aquellos patrones mecánicos que ponen rápida mente, es decir cabeza que detiene el cuerpo, que lo aliena. ¿Cuáles son los movimientos y ejercicios que rompen con estas conductas obligadas? ¿Cómo se aborda un texto experimentado desde el cuerpo? Hay señales trabajadas en la historia, y otras que debemos inscribir.
que bella visión... y la foto dice aun más que todas estas palabras... gracias
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